Si vamos a los bifes te diría
que con esta foto
yo me mataría.
Me haría una harakiri.
La metería en una coctelera
con todas las pastillas que se te ocurran
y me la tomaría.
La picaría hasta el polvo
con cuchillo sucio de carnicero
y me la transfundiría.
Haría cien mil copias
y, origami mediante,
las convertiría en flores para mi corona.
fáh