/Soy de plata y exacto. No tengo prejuicios. 

Todo lo que veo lo trago de inmediato tal y como es, sin la turbiedad del amor o de la antipatía. 

No soy cruel, sólo veraz.  S. Plath

Es como si la continuidad del ojo errara. Como si sin señal ni símbolo, ni cosa que querramos leer y alardear y decir, yo sé yo sé, yo sé describir, yo estudié, tu norma tu dogma tu docta. Es como si la continuidad de los abrazos no fuesen manos, como si de las manos no se desprendiese el tacto, como si del tacto no resultasen todos los errores y todos los placeres. Es como estar entre confluencias saladas dulces del mar del río y no saber por dónde ni cómo nadar; no saber si hubo orilla siquiera, pero aún así, de haberla habido, ser incapaz de recordarla sin agua en los pulmones, sin desesperación de brazada a ningún lado dirigida.
No queda nadie en tierra firme. No hubo. No había. Paz ni bosque donde refugiarse. No hubo.
Es agua y brazada lo visible. Es sólo viento el cielo dibujado.

Cerrar ojos oídos boca. Bloquear inspiración trabar costilla

Bocanada

Que el nombre ya no sea la cosa. La cosa extinga su nombre

Darse vuelta un segundo. Desconocer palabra tacto lengua

Que la cosa sea sólo nombre. Palabra que extingue la cosa

Materia entre los dedos. Calambre. Materia hecha agua cayendo de cualquier cielo

Que la cosa nombre el nombre sin el revés de su sombra. Que el nombre extinguido cumpla su condena y se borre

Que sea siempre el silencio tierra germen
patio lindo patio casa planta pasto

Que los pasos naturalicen lo que esta oscuridad, negra negra mansa, no puede cubrir

 fantasmas fantasmas sombra sombra fantasma


Que duerma como nueva sin sarcófagos ni plagas

Que ojalá el día despierte el canto en tu furia

y no quede nada.